Uno de los aspectos más singulares del Torico de la Cuerda de Chiva es la lujosa badana que corona al totem
La badana es una de las señas de identidad de nuestra fiesta, el torico de la cuerda. La badana es un apero de labranza de cuero transformado, que se usa en Chiva para proteger la cabeza del toro, de rozaduras y tensiones de la cuerda, adornada con borlas, espejillos y lanas de colores.
La badana juega así un doble papel. Tal y como explica Pablo Barbero, “guarnicionero” oficial del Torico de Chiva, por un lado evita que el animal sufra daños al estar en contacto con la cuerda: «Es una gran responsabilidad, porque la seguridad del toro depende de tu trabajo. Y en Chiva la protección del toro se cuida al máximo detalle. El animal es el centro de la fiesta y si sufre o le hacen daño se acaba la fiesta. Por ello en la elaboración de la badana hay que cuidar mucho cada uno de los detalles y los acabados, para que sea algo bonito y que, a la vez, proteja al toro».
Esta forma de engalanar a los animales, la vemos también, por ejemplo, en otro de los actos que conforman este gran ritual de cortejo que son nuestras fiestas del Torico: las “grupas”. En él, los mozos engalanan su carros y las monturas con la que pasean a sus amadas, para después conducir a los astados en la “entrá”.
Pablo Barbero empezó a aprender el oficio hace casi diez años, como una afición. Su maestro fue Leopoldo, el “corretger” local que venía de una larga tradición familiar de artesanos que realizaban nuestras emblemáticas badanas, entre otros elementos de guarnicionería. De él aprendió todos los secretos de la elaboración y, «cuando él falleció, en 2013, yo continué con la tradición. Curiosamente coincidió con el año del Congreso de la Federación del Toro de Cuerda en Chiva, por lo que la responsabilidad ese año fue doble», nos comenta el artesano.
Elaboración de las badanas del torico de Chiva
Así, cuando llega octubre comienza a elaborar, hábil y minuciosamente, estos elementos primorosos que lucen nuestros toricos durante las entrañables fiestas de agosto. Cada uno tiene la suya, más o menos adornadas, Además, está la badana “de lujo” que es la que los clavarios bajan en un emotivo desfile multicolor hasta los toriles, el primero de los tres días de carreras.
Todas tienen el mismo proceso de elaboración: la cuerda, que luce los colores de la bandera de España, y desde hace unos años se utiliza también otra a la que se le ha añadido el azul; va unida a la espuma, envuelta en piel de color, que es lo que protege la testuz del astado. Ésta se adorna, como hemos comentado, con las borlas, flecos, lanas de colores y espejuelos, de manera que luzca en la cabeza del toro, pero que no le moleste.
Además su diseño no debe entorpecer las labores de los “badaneros”, que son los encargados de poner esta guarnición. De su habilidad y pericia depende que el toro se sienta cómodo con ella y, también la seguridad de los corredores.
Este símbolo del Torico de la Cuerda es un ejemplo de nuestra preocupación por el bienestar del animal que propicia el ritual de cosecha. Además luce en la cabeza del animal lustral en cada una de las carreras, cuando entra en las casas para “preñarlas”, y lo distingue como rey de las fiestas.