La semana pasada analizamos un audiovisual, de principios del pasado siglo, sobre nuestro pueblo y su festejo más representativo: El Torico. En esta ocasión queremos resaltar otro film, que también podemos ver en el Centro de Interpretación del Torico (CIT), realizado por el magnífico artista chivano Francisco Gimeno, entre los años 1960 y 1970: El torico de Chiva, 1963.
Esta entrañable película, grabada en ocho m.m., en color, fue cedida por la familia Gimeno y depositada por la Asociación Cultural Átame en el archivo del Instituto Valenciano de Cinematografía (IVAC). Como señaló Inma Trull (Jefa de Recuperación de la Filmoteca) en el número cinco de la dignísima publicación editada por la citada Asociación (2010): “ilustran a la perfección las peculiaridades de la fiesta: visita de la turmabulta a diversas casas del pueblo, subiendo y bajando empinadas cuestas, y un sorprendente respeto al animal, que en ningún momento es maltratado, y cuyo destino no es el sacrificio, lo que diferencia esta manifestación cultural taurina de otras más cruentas, y no por ellos menos populares”.
Por otra parte, entrando en cuestiones técnicas, esta especialista añade: “está rodada con sorprendente maestría… es muy notable la estabilidad de la imagen en la toma de estas vistas, teniendo en cuenta que porta la cámara en mano en todo momento, asimismo, sorprende la variedad de puntos de vista, el comedimiento en la duración de las tomas, el uso acertado de recursos como la panorámica circular, que aporta dinamismo a la escena… parece que Gimeno esté apostado simultáneamente en cada balcón, en cada esquina, esperando al toro, y resuelve este laberinto de imágenes montándolas probablemente sin más ayuda que su lógica y su memoria. El resultado de esta película ágil y moderna en su factura, plena de detalles que sirven tanto al estudioso de la historia y costumbres de Chiva como al espectador aficionado”.
Aunque siendo joven tuvo que trasladarse a vivir a Benetusser, Francisco Gimeno (Chiva, 1931-2010), nunca dejó de volver periódicamente a su pueblo y mostró gran interés en inmortalizarlo, a través de magistrales fotografías o de películas como la que hemos mencionado. Con el tiempo se han convertido en entrañables instantáneas de su singular mirada, su particular paisaje emocional. Documentos únicos que, como los diferentes materiales que atesora el CIT, se convierten en vitales fragmentos de nuestra memoria.
Juan Carrión Miró.
Centro de Interpretación del Torico (CIT)
Fotograma-El-Torico-de-Chiva.-La-pelicula
Foto-Francisco-Gimeno-Autorretrato.-1956.-En-Publicacion-Atame-2010
El-Torico-de-Chiva.-La-pelicula.-Francisco-Gimeno.-Editada-por-Atame