En artículos anteriores hemos destacado la importancia de las tradicionales cucañas dentro del sistema ritual que conforma los festejos del Torico. En estas fiestas de cortejo, de transición biográfica, siempre han tenido gran relevancia las divertidas pruebas de habilidad y fuerza en la que los jóvenes demostraban su valía al clan, su valor, como en las mismas carreras. Juegos como el Tiro de garrote, el Tiro de cuerda, el Palo ensebado, Pulsos, Piñatas, carreras de sacos, de bicicletas o desafíos hípicos, como los torneos de cintas o de natación en la balsa, entre otros.
La popularidad de estas competiciones, tras los típicos y animados almuerzos comunales, fue bastante grande, como evidencia el hecho de que fueran reflejados en medios de comunicación nacionales como el periódico de Madrid La Voz. Este diario se hará eco, precisamente, de las concurridas celebraciones náuticas en la balsa, como muestra la singular foto que publica el 22 de agosto de 1935. Vemos como se destaca nuestro festejo en la sección de Deportes, junto a otros artículos como el que hace referencia al campeonato de España de atletismo o a los mundiales de ciclismo; o encuestas que hoy nos resultan chocantes como la que pregunta si debe extranjerizarse el fútbol en los clubs nacionales, entre otras notas.
Es fundamental volver a recuperar una celebración, que en este diario de la capital se destaca en mayúsculas y que formaba, hasta hace unos años, parte intrínseca e indivisible del rito taurico. Esas Cucañas entrañables que servían también, para unir, para estrechar lazos, para compartir; que fomentaban la convivencia y la alegría en ese tiempo de la cosecha, donde siempre ha triunfado la idea de la abundancia, de la plenitud. El momento del reencuentro y el hermanamiento, del derroche y el exceso, de la solidaridad y la libertad, el desenfado y el atrevimiento. La plaza, se convierte en el gran foro, en el gran espacio común de encuentro, de reencuentro. Allí fluye el agua fecunda que propicia la resurrección, la libertad y el hermanamiento. La balsa se convierte en el bálsamo, en la pila bautismal, en el saludable piélago lustral que refresca y purifica el pueblo.
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JCM.
Centro de Interpretación Patrimonial.
Cucañas en Chiva. Fotografía en periodico La Voz. 22-08-1935.
Detalle periódico La Voz. 22-08-1935.